Deshiré Pérez Royo: del quirófano al cuadrilongo
Tras años dedicada por completo a la medicina, la amazona aragonesa Deshiré Pérez Royo vuelve a los cuadrilongos con la misma pasión y elegancia que la llevaron, siendo apenas una niña, a lo más alto de la doma clásica nacional.

En Sobradiel, muchos aún recuerdan a aquella niña de apenas tres años montando a su pony Bonita por la ribera del Ebro. Era Deshiré Pérez Royo, una pequeña amazona que a los 11 ya competía en el Campeonato de España de Doma Clásica (2006).
Junto a su inseparable Ninja, un pony holandés, acumuló triunfos en Aragón, Cataluña, Valencia y Toledo. Su nombre sonaba con fuerza entre las jóvenes promesas del país.
Hoy, aquella niña ha crecido y cambiado el uniforme de amazona por la bata blanca: Deshiré es cirujana oral en un hospital de Tudela. Pero su verdadera pasión —los caballos— nunca la abandonó.

Del quirófano al cuadrilongo
Hoy, aquella niña es una profesional de la medicina. Después de varios años alejada de la competición para culminar sus estudios universitarios, ha decidido volver a competir, y lo hace con la misma disciplina que caracteriza tanto su profesión como su deporte.
“Después de tantos años sin montar a nivel profesional, ha sido un respiro de aire fresco. Para mí los caballos son mi pasión, y volver a este nivel es todo un regalo”, confiesa con una sonrisa.

Medicina, empatía y doma clásica
Compaginar los quirófanos con la doma no es tarea sencilla, pero Deshiré lo hace con naturalidad.
“Monto todas las tardes. Me llevo la ropa de montar a la consulta y, al terminar, voy directa al centro. Compensa saber que después del trabajo me esperan mis caballos”, explica.
Su formación médica también ha influido en su relación con los caballos:
“Tratar pacientes te da un nivel de empatía muy alto, y eso se refleja con los caballos. Ellos sienten todo. Comprenderlos, observarlos, escucharlos… es una parte esencial del entrenamiento.”
Una vuelta cargada de ilusión

Aunque su regreso a la competición pueda parecer un desafío, para ella ha sido un proceso natural gracias al apoyo de su familia.
“Ha sido fácil. Mis padres siempre están ahí en cada entrenamiento, ayudándome a preparar los caballos y dándome ánimos.”
De cara al próximo Campeonato de Aragón, Deshiré vuelve con más madurez y serenidad, pero con la misma pasión que la llevó al éxito en su infancia.
“Me encanta la competición, los nervios previos y el proceso. Siempre he sido una persona competitiva, y el querer superarme día a día mantiene intactas mis ganas de seguir prosperando.”
Un mensaje para quienes sueñan con volver
Su historia es también una inspiración para todos aquellos que, por estudios o trabajo, tuvieron que dejar temporalmente su pasión.
“Que lo hagan. La vida se pasa demasiado rápido como para no dedicar tiempo a lo que más amas y te hace disfrutar.”

Deshiré Pérez Royo ha cambiado el pony Ninja por dos imponentes Pura Raza Española, y las pistas infantiles por los cuadrilongos de alto rendimiento. Pero la esencia sigue siendo la misma: una amazona disciplinada, elegante y profundamente enamorada de su deporte.
Desde el quirófano hasta la pista, su vida refleja una misma filosofía: precisión, dedicación y sensibilidad.
Y es que, tanto en la medicina como en la doma clásica, el verdadero arte está en la armonía.


